Balbuceo, sagrado es tu nombre y el porte en que se hunde
tu pecho de encierro y distorsión. Yo quisiera
tener tu mecánica indecente, indecente y para la música.
No te deprimas; la cabeza
¡no es tu órgano más desarrollado!
Tu plancton, tu plancton de la era del hielo,
tu cúmulo de escarcha de endurecido y despreciado
te permite cortar todo a la mitad.
(Aseguran que interrurmpir
es el verdadero don de la naturaleza.)
Balbuceá, hundíte en mi pecho
que después se olvida,
las generaciones no existen a la par de las reglas.
Entre tu balb y mi charco
juntamos los pedazos
hacemos algo parecido a una canción.
Yo quisiera compartir esta mecánica indecente,
proclamarla entre las piedras, saludarlas
y que me contesten.
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3 comentarios:
entre tu balb y mi charco
mi charc y tu ba
y asi
otraa!
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